Ivette Landeros
Autora de Nadie se lo dijo al abejorro y Sofía 26
Autora de Nadie se lo dijo al abejorro y Sofía 26
Hola, Ivette… gracias por esta entrevista. Déjame empezar por un antecedente: en agosto de 2020 publicaste tu primera novela, Sofía 26, y apenas tres años después publicas tu segunda obra (Nadie se lo dijo al abejorro), también una novela. En Sofía 26 narras la historia de una chica que se lanza en una especie de viaje iniciático para reencontrarse. Cuando leí tu primera novela, me pareció que se trataba de una especie de coming of age (Bildungsroman para los puristas), una novela de autodescubrimiento en todo sentido. Ahora, en Nadie se lo dijo al abejorro, tengo la sensación de que estamos frente a un coming of age distinto, una especie de “meta género”, un género dentro de otro género; si bien el coming of age se centra en el crecimiento de sus protagonistas, en tu novela lo que haces es centrarte en el crecimiento particular de la protagonista como escritora: una novela que habla sobre el crecimiento de la protagonista como escritora… y la escritora es la misma autora. Así que quiero empezar por ahí, porque tengo la sensación de que empezaste a escribir la novela sin eso en mente, y al final parece que Nadie se lo dijo al abejorro es una especie de secuela de Sofía 26, en el sentido de que podemos asumir que se trata de la misma preocupación en ambas: la preocupación por el autodescubrimiento, ya como persona (en Sofía 26), ya como escritora (en Nadie se lo dijo al abejorro)… cuéntame, ¿qué tanto interés tienes en ese autodescubrimiento, o si solamente te ha salido al natural, como algo que -sin saberlo- te viene a la mente como un impulso?
“…como lectora, me gustan las historias así, reales, de personas que se quiebran para poder transformarse. Quise escribir sobre esa vulnerabilidad… “
Entiendo que antes de Nadie se lo dijo al abejorro, intentaste con otros temas y otros recursos literarios, así que te pregunto: ¿cómo fue ese proceso en el que ibas a contracorriente de tu propio autodescubrimiento? Creo que para tus lectores y lectores sería interesante conocer ese aspecto poco conocido, que es el de desechar temas y páginas ya escritas.
En Cartas a un joven poeta (1929), Rilke no sólo ofrece consejos a su destinatario, sino que ofrece también su visión acerca de los temas humanos de siempre: el amor, la muerte, la soledad… Te pregunto: en tu novela intentas exponer cómo es el camino de una escritora y cómo se enfrenta también a las pequeñas cosas de la vida cotidiana, fuera del romanticismo en el que a veces se envuelve a los y a las escritoras, ¿qué temas te parece que son fundamentales para exponer frente a quienes desean ser escritoras? No sé, pero se me ocurre que, a casi un siglo de las cartas de Rilke, los temas podrían ser diferentes ¿el dinero, la estabilidad económica, el apoyo filial? ¿Cuáles son los temas fundamentales para hablar de ellos con alguien que quiere dedicarse a la literatura?
“Desde que publiqué esa primera novela, mi vida ya no fue la misma: perdí mi trabajo, lo recuperé, y después renuncié a él porque ya no encajaba en mi plan de vida…”
Creo que una de las partes más emotivas de Nadie se lo dijo al abejorro es la que habla sobre la pandemia del Covid-19. Fue una época difícil para muchos, algunos perdimos a amigos, familiares… En el proceso creativo, algunos autores y autoras experimentan un conflicto, porque su éxito creativo depende, a veces, del egoísmo afectivo. Quiero decir que no conozco a una persona que, estando en la cima de su éxito, se encuentre también cuidando a su madre enferma. A ti tocó estar en esa disyuntiva: mientras escribías tu novela, estabas también en un conflicto emocional por la enfermedad y muerte de una persona muy querida por ti… así que te pregunto -y este creo que es un tema difícil- ¿cómo dirías que una escritora ha de sobrellevar el día a día de su trabajo literario, mientras tiene que lidiar con ese tipo de conflictos emocionales sin caer en el egoísmo o renunciar a su obra?
Por último, Ivette, me gustaría preguntarte cómo ha cambiado tu vida desde Sofía 26, es decir: de aquella época a tu presente ¿qué tanto ha cambiado tu vida como escritora y cómo ha cambiado tu visión sobre el ámbito literario? ¿lo que ves ahora se parece a lo que creías hace tres años? ¿lo que ahora haces ha cambiado en la dirección que esperabas como escritora?