Descripción
Los personajes de esta novela tienen la dualidad de ser reales —de carne y hueso— pero también se abren a la posibilidad de transmutarse. Por momentos son fantasmas que aparecen y huyen a la hora que se les ocurre. Cuando creemos que uno de ellos ha agotado sus capacidades de omnipresencia, de pronto, brota como una descarga luminiscente un destello más que se engarza con otro u otros capítulos del sueño perenne que contiene cada estampa.
Lola va atestiguando, inmutable, el devenir de un tiempo funesto, anárquico a causa de una «protección» apartada, y el de una pena interminable.
Valoraciones
No hay valoraciones aún.